Hoy le han hecho la cuarta quimioterapia fuerte y, nuevamente, a esta hora está mal, con los efectos lamentables y evidentes que deja ese tratamiento. Bueno, es lo único que, por el momento, de acuerdo a la medicina se puede hacer. Es realmente demoledor verla así, golepada, debilitada, afectada. Espero que salga realmente de esto, pero hoy volví a plantearle al médico tratan que nos precisara si había un riesgo por los bordes de 3 milímetros; dijo que no, pero noto soberbia en su manera de responder y le pido a Dios, si existe, que lo que nos indica es cierto y que este cancer que padece mi amada se supere. El futuro me da pavor, no sé que viene, intuyo, pero me asusto, cuando intuyo algo hermoso, simplemente desecho ese pensamiento, pues lo veo irreal y la realidad me ha demostrado que no fallé. Imagino algo terrible, me angustio, pues tarde o temprano llegará.
Por otro lado, mis padres me pregutnaron por los niños y tuve que decirle que mi pequeño hijo casi de hecho será operado en febrero. Dios, si tu hubieras sido hombre, hoy supieras ser Dios. Duele, duele mucho y no sñe que hacer, es imposible hacer algo certero. En fin. Por partida doble, el dolor me aturde, me aniquila.